¡Hola de nuevo a todos!
He vuelto después de casi tres semanas de aislamiento del "mundo ordinario".
Por razones de salud, más concretamente, el agotamiento de mi mente... Al parecer (vaya, es seguro) que le doy demasiadas vueltas a las cosas buscándole todas las soluciones y formas posibles de lo que pueda pasar... aparte de preocuparme por todo.
Como dice mi médico "o te relajas, o te relajas... no tienes alternativa".
Así pues, llega un momento en el que mi mente deja de pensar... vivo en un estado de agotamiento total así que tengo que desestresarme, mandato del médico.
Ahora vuelvo a la Universidad y vuelvo a entrar en un estado de estrés y ansiedad casi constante... con dolores de cabeza y demás.
A muchos de vosotros os pasará lo mismo. La verdad es que llega un momento que el agotamiento es completo y preocupante.
Por eso ya casi no actualizo yo... no tengo ideas "buenas" (estoy escribiendo a la vez que lo pienso jeje). Digamos que hemos empezado con medio pie fuera puesto que me han cambiado el horario y están todas las asignaturas muy concentradas y son muy densas.
El tiempo del "descanso" se acaba para volver a sumirnos en un estado de constante aprendizaje del que no podemos escapar. Planes de Bolonia a la vuelta de la esquina,... vueltas y más vueltas. Trayectos agotadores... lo que viene siendo nuestra rutina diaria.
Soy consciente de mi agotamiento pero incapaz de evitarlo...
¡Ojalá hubiera un chip para poder dejar de pensar en algunos momentos! jajajaj
Anécdotas de nuestra compleja mente.
¡Feliz resto de semana para todos!
Os he echado de menos, intentaré pasarme con frecuencia pero me resulta casi imposible por culpa de mis horarios... parece que no tengo tiempo para mí misma,
tendré que aprender a organizarme mejor.
Os he echado de menos.
Mil besos!
Noa.